Ir a la receta en gallego
Que tal, después de estes casi dos meses sabáticos que me eché, vuelvo a asomarme por este rincón.
Casi no acierto a hacerlo, me paso como aquel que fue a aprender inglés y cuando volvio no sabía hablar gallego, hasta que pegó con el rastrillo en las narices.
En este tiempo tuve la ocasión de conocer a Conchi de Cocinando con setas, un blog mas que recomendable y una mermelada de setas enorme que me regaló.
En esta vuelta vamos a comenzar con algo muy sencillo, por aquello de ir cogiendo ritmo.
Necesitaremos:
8 muslos de pollo Corral Coren
100 ml de vinagre balsámico
200 ml de vino blanco
1 cucharada de miel
Aceite de oliva
Sal
Pimienta
Salpimentamos los muslos y los doramos en aceite de oliva.
Al tiempo mezclamos el vinagre, el vino y la miel.
Ponemos los muslos en una bandeja que pueda ir al horno y regamos con la mezcla hecha.
Precalentamos el horno a 180º y ponemos unos 30 minutos o hasta que se vean hechos.
Durante este tiempo vamos regando regularmente con su propia salsa.
Se la salsa no tiene la consistencia deseada, se retiran los muslos y reducimos en una cazuela.
Como guarnición un arroz blanco, un puré de patatas, unas verduras a la plancha, etc.
Ya veis, sencillo y rápido. Ojo con los sabores: vinagre y miel.
Que tal, después de estes casi dos meses sabáticos que me eché, vuelvo a asomarme por este rincón.
Casi no acierto a hacerlo, me paso como aquel que fue a aprender inglés y cuando volvio no sabía hablar gallego, hasta que pegó con el rastrillo en las narices.
En este tiempo tuve la ocasión de conocer a Conchi de Cocinando con setas, un blog mas que recomendable y una mermelada de setas enorme que me regaló.
En esta vuelta vamos a comenzar con algo muy sencillo, por aquello de ir cogiendo ritmo.
Necesitaremos:
8 muslos de pollo Corral Coren
100 ml de vinagre balsámico
200 ml de vino blanco
1 cucharada de miel
Aceite de oliva
Sal
Pimienta
Salpimentamos los muslos y los doramos en aceite de oliva.
Al tiempo mezclamos el vinagre, el vino y la miel.
Ponemos los muslos en una bandeja que pueda ir al horno y regamos con la mezcla hecha.
Precalentamos el horno a 180º y ponemos unos 30 minutos o hasta que se vean hechos.
Durante este tiempo vamos regando regularmente con su propia salsa.
Se la salsa no tiene la consistencia deseada, se retiran los muslos y reducimos en una cazuela.
Como guarnición un arroz blanco, un puré de patatas, unas verduras a la plancha, etc.
Ya veis, sencillo y rápido. Ojo con los sabores: vinagre y miel.