Esta es una receta que ya preparé hace algún tiempo y con todas las reservas que algunas personas puedan tener para con esta carne, resulta muy agradable aparte de ser muy saludable.
Ya sabéis los mas atrevidos, aquí tenéis una opción con la que no vais a dejar a nadie indiferente.
Para la receta que nos ocupa vamos a necesitar:
1 conejo
250 grs de vieiras
150 grs de zanahoria
100 grs de cebolla
2 diente de ajo
1 hoja de laurel
Una rama pequeña de romero
1 litro de agua
Un poco de jengibre
6 hojas de gelatina
Una copa de vino blanco
Sal y pimienta
Cortamos en trozos el conejo y lo marcamos en una sartén con aceite y un poco de jengibre.
Limpiamos las verduras y cortamos en juliana, las doramos y añadimos el conejo. Incorporamos el vino blanco y dejamos evaporar el alcohol. Añadimos las especias y el agua. Dejamos cocer hasta que esté tierno. Podemos acelerar el proceso si usamos la olla exprés.
Cuando el conejo está, lo sacamos de la olla, deshuesamos y picamos la carne.
Llenamos unos moldes (si los tenéis tipo bombón mucho mejor) con la mezcla de la carne con la salsa y dejamos a temperatura ambiente (se fuese necesario metemos en la nevera).
Reducimos la salsa sobrante.
Lavamos y limpiamos las vieiras y las marcamos en una sartén a fuego fuerte, con un poco de jengibre y aceite de oliva.
Presentamos en el plato salseando con la salsa del estofado.
Como siempre os digo, merece la pena el trabajo por el resultado final.