Ir a la receta en gallego
Con todo este ir y venir está un poco de lado la publicación de recetas, pero vamos a ponerle remedio.
El otro día en la reunión de blogguers, comenté la forma de preparar patatas de manera un poco distinta coma guarnición.
Tengo que reconocer que conozco algunas formas de presentar patatas (puente grande, chips, rejilla, paja, cerilla, en puré, duquesa, bolas, cuadrados, panadera, etc.), pero nunca viera las Hasselback.
Vamos con ellas y procuraremos:
Patatas nuevas
Mezcla de 5 pimientas
Hojas de hierbas (romero, orégano, tomillo...)
Mantequilla (opcional)
Pimentón agridulce de La Vera
Sal y aceite
Sal Maldón (para la presentación)
Recomiendo que no sean muy grandes las patatas, pues ya sabemos lo que tardan en hacerse en el horno.
Lavamos bien las patatas y tenemos que proceder a hacerle cortes hasta dejarla como un libro. Los cortes no pueden llegar al fondo de la patata y para ello pondremos en la mesa de trabajo como dos guías en paralelo, sobre as que pondremos la patata con una parte por debajo de las guías y poder cortar con tranquilidad.
Precalentamos el horno a 220 º y ponemos las patatas en una bandeja, untada con aceite, que pueda ir al horno.
Colocamos entre algunos de los cortes de las patatas hojas de la hierba que escojamos para aromatizar, salamos y regamos con aceite y ponemos en horno unos 35 minutos (los tempos del horno van a depender del tamaño de las patatas).
Pasado el tiempo sacamos del horno y somos generosos aderezando con la mezcla de pimientas.
Las regamos con el aceite de la cocción o se puede poner por encima de ellas unos dados de mantequilla.
Llevamos de nuevo al horno y dejamos hacer hasta que estén doradas y a vuestro gusto: tiernas o mas secas.
Una vez fuera del horno echamos el pimentón y regamos con los jugos de la cocción.
Las podemos usar como guarnición o casi como primer plato.
Una presentación que llama la atención. Por lo menos a mi.
Con todo este ir y venir está un poco de lado la publicación de recetas, pero vamos a ponerle remedio.
El otro día en la reunión de blogguers, comenté la forma de preparar patatas de manera un poco distinta coma guarnición.
Tengo que reconocer que conozco algunas formas de presentar patatas (puente grande, chips, rejilla, paja, cerilla, en puré, duquesa, bolas, cuadrados, panadera, etc.), pero nunca viera las Hasselback.
Vamos con ellas y procuraremos:
Patatas nuevas
Mezcla de 5 pimientas
Hojas de hierbas (romero, orégano, tomillo...)
Mantequilla (opcional)
Pimentón agridulce de La Vera
Sal y aceite
Sal Maldón (para la presentación)
Recomiendo que no sean muy grandes las patatas, pues ya sabemos lo que tardan en hacerse en el horno.
Lavamos bien las patatas y tenemos que proceder a hacerle cortes hasta dejarla como un libro. Los cortes no pueden llegar al fondo de la patata y para ello pondremos en la mesa de trabajo como dos guías en paralelo, sobre as que pondremos la patata con una parte por debajo de las guías y poder cortar con tranquilidad.
Precalentamos el horno a 220 º y ponemos las patatas en una bandeja, untada con aceite, que pueda ir al horno.
Colocamos entre algunos de los cortes de las patatas hojas de la hierba que escojamos para aromatizar, salamos y regamos con aceite y ponemos en horno unos 35 minutos (los tempos del horno van a depender del tamaño de las patatas).
Pasado el tiempo sacamos del horno y somos generosos aderezando con la mezcla de pimientas.
Las regamos con el aceite de la cocción o se puede poner por encima de ellas unos dados de mantequilla.
Llevamos de nuevo al horno y dejamos hacer hasta que estén doradas y a vuestro gusto: tiernas o mas secas.
Una vez fuera del horno echamos el pimentón y regamos con los jugos de la cocción.
Las podemos usar como guarnición o casi como primer plato.
Una presentación que llama la atención. Por lo menos a mi.